¿Sabías que cambiando pequeños actos del día a día podemos hacer un gran cambio y cuidar de nuestra madre naturaleza, la Tierra?
Desde Buenas Vibras y junto a nuestros pasajeros ya pusimos manos a la obra:
- Reduciendo a cero el uso de papel (con vouchers online, facturas electrónicas, etc).
- Separando y reciclando residuos (En nuestras casas y oficinas).
- Regulando la temperatura de los aires acondicionados en 24ºC (En nuestras casas y oficinas).
- Concientizando a nuestro staff y pasajeros sobre nuestro impacto en los destinos turísticos e impulsando acciones que fomenten el equilibrio ambiental.
En el día mundial te la Tierra, junto a los amigos de Fundación Vida Silvestre te traemos 12 acciones para, entre todos, hacer de nuestro mundo, un planeta mejor.
1. Apagá la luz
Si vas a salir de tu casa, apagá todas las luces que no uses. También recomendamos desenchufar todos los artefactos, como televisores, electrodomésticos y cargadores de celular, para que no consuman energía pasivamente. Consumir de forma eficiente no sólo es bueno para el planeta: también lo es para tu bolsillo.
2. Electrodomésticos eficientes
A la hora de comprar un nuevo electrodoméstico prestale atención a la etiqueta de eficiencia energética. Cuanto más alto sea el valor, más eficiente es la forma en la que ese artefacto consume energía. Esto no sólo se va a ver reflejado en la boleta: vas a estar generando un impacto menor. Podés ver todas las opciones disponibles y comparar precios en www.toptenargentina.org.
3. No a los plásticos de un solo uso
¿Alguna vez pensaste en dónde van los plásticos que usás? A veces los usás por unos instantes: sólo unos minutos o unos segundos, pero tardan cerca de 500 años en desintegrarse. No es un buen negocio: decile no a las bolsas, a los sorbetes, a los cubiertos descartables y a todos los plásticos que uses una sola vez. Hay muchas opciones.
4. El aire en 24
El calor nos golpea fuerte, pero con el aire en 24ºC es la medida justa para ser eficientes sin aportar que el planeta siga estando cada vez más y más caliente cada año.
5. Opciones eficientes de transporte
Hay varias opciones: en lo individual, la bicicleta es la más eficiente ya que no genera emisiones y es buena para el ejercicio. Si no queda otra, elegí lo compartido: el transporte público es la mejor opción. Y si no te queda otra que ir en auto: compartilo. Si lo usás para ir al trabajo, compartilo con otras personas para minimizar el impacto. También aplica para viajes largos. ¡Y perdele el miedo a caminar! Siempre es una buena opción para distancias cortas.
6. Cerrá la canilla
¿Cómo usás el agua? Para lavar los platos o cepillarte los dientes, cerrá la canilla. Si vas a limpiar o baldear la vereda, no dejes correr el agua. Es un recurso demasiado rico como para desperdiciarlo.
7. FSC y otros productos certificados
¿De dónde vienen los productos que consumís? Una forma de consumir responsablemente es conocer sus orígenes. En Argentina, Vida Silvestre impulsó la certificación FSC para productos forestales, como papel y madera, que vienen de fuentes responsables. Buscá esta etiqueta y otras.
8. Comprá local y de estación
Los productos locales tienen una huella menor. Al elegir productos, priorizá aquellos que hayan sido cosechados o manufacturados lo más cerca posible de donde te encuentres. Un ejemplo claro son las frutas y verduras de estación. Además, en lo posible elegí alimentos orgánicos o libres de agrotóxicos, componentes químicos que a menudo terminan en el suelo, aire y agua.
9. Separá la basura
Reducí al extremo tu generación de basura separando aquellos materiales reciclables, como papeles, vidrios, metales y plásticos. Si tenés espacio y querés hacerla completa, instalá una compostera para verter los residuos orgánicos.
10. Plantá árboles nativos
La flora nativa, aquella originaria del lugar en donde te encontrás, tiene una relación ecológica directa con los animales de la zona, al haber evolucionado en conjunto. Priorizá las plantas y árboles nativos en tu casa para recibir la visita de aves y mariposas a quienes vas a ayudar a conseguir alimento.
11. Preguntate: ¿Realmente lo necesito?
Antes de elegir un producto, tené en cuenta si realmente lo necesitás y para qué lo hacés. Todo genera un impacto, pero si lo podemos evitar o minimizar, mejor: ¿Necesito lo que voy a comprar? ¿Quiero satisfacer un deseo? ¿Estoy eligiendo por mi mismo o es una compra compulsiva? ¿Cuántos tengo ya? ¿Podría pedirlo prestado a un amigo o a un familiar?
12. Compartí estos consejos
Muchos de estos consejos se pueden multiplicar si hablás del asunto. El cambio comienza en casa y es responsabilidad de todos. ¡Que corra la voz!