Me acuerdo cuando mi abuelo lo escuchaba durante horas y yo, sentado en su regazo, veía como disfrutaba de esa música que, a mis oídos, no lograba encontrar el sentido.
Si cuando veía que se ponía a cantar sus canciones y se sumaban mi abuela, mi vieja, mi viejo y quien estuviese en la casa y no me quedaba otra que balbucear y “cantar” con ellos. Más allá de que no conocía quien era, simplemente “cantaba” porque era un momento de felicidad.
Esas películas en blanco y negro, que por jugar con mi camioncito o mis juguetes, no veía pero hablaba y me pedían silencio para poder escuchar los diálogos. Me daba rabia, no entendía, era chico. Quería jugar.
Fui creciendo y ya entendía que cantaba… y me enganchaba con esas películas en BLANCO y NEGRO, por más que ya existiese la TV COLOR. Veía que aparecía y sabía quien era. Entendía esos diálogos, encontraba sentido a esa música. Lo empecé a escuchar. Lo empecé a cantar y a sentir esa felicidad que sus letras transmiten.
Hoy se nos fue un exponente de nuestra Argentina. Un músico que supo cautivar a propios y extraños. Una leyenda de la música, una leyenda del tango. Hoy nos dejo Mariano Mores.
Nació un 18 de Febrero de 1918 en el barrio porteño de San Telmo y su carrera comenzó con tan solo 14 años de edad allá por 1932, en el Cafe Vicente en la antigua Calle Corrientes, que era el polo tanguero por excelencia en aquella época.
Autor de varios de los tangos más famosos, entre los que se encuentran “Uno” y “Cafetín de Buenos Aires” (con Enrique Santos Discépolo), “Adiós pampa mía”, “Cuartito azul”, “Taquito militar”, “Tanguera”, “El firulete”, “El patio de la morocha” (con Cátulo Castillo), “En esta tarde gris” y “Gricel” (con José María Contursi).
“Uno” y “Adiós pampa mía” figuran entre los diez tangos más difundidos en el mundo, por los que recibió 26 discos de oro y platino.
Mariano Mores fue elegido por votación popular realizada en el año 2000 como “Mejor compositor de tango del siglo” y su tema Taquito militar resultó votado como “Mejor milonga del siglo”.
No solo realizo composiciones musicales, sino que también produjo gran cantidad de revistas con conjugaban música, danza, teatro y humor como BUENAS NOCHES BUENOS AIRES (1963), BUENOS AIRES CANTA AL MUNDO (1966), YO CANTO A MI ARGENTINA (1973), entre otros.
También fue actor y músico en películas como “La doctora quiere tangos” (1949), “Corrientes, calle de ensueños” (1949) y “La voz de mi ciudad” (1953) y como músico también en “Buenas noches, Buenos Aires” (1964)
Trabajo con Mirtha Legrand en la serie cómico musical “M ama a M” (1957) y en la serie “La familia Mores” (1967).
No debemos olvidar que en 1950 conformo su Orquesta Lírica Popular y su Sexteto Rítmico Moderno. Varios familiares se sumaron a sus espectáculos y conformaron “La familia Mores”.
Entre tantas cosas que hizo, como no ser un exponente, como no ser lo que fue.
¡GRACIAS POR TANTA MAGIA TROESMA!
¡HASTA SIEMPRE!
